16.7.06

Anónimos...

Sres. Comisión Directiva
Asociación de Prensa de Tucumán

Nos dirigimos a Uds. en nuestro carácter de afiliados a esta entidad sindical y como integrantes de la agrupación Corriente de Trabajadores de Prensa, para poner en su conocimiento que se ha montado una campaña de desprestigio y difamación en contra de algunos miembros del grupo y de compañeros representantes de base de distintos medios periodísticos. La acción se viene desarrollando mediante correos electronicos anónimos.
Ante la situación dada, exigimos que las autoridades de la APT realicen un pronunciamiento público de repudio a través del portal primerafuente y de la revista sindical Bajando Teclas.
Este tipo de campañas, de carácter intimidatorio, desalientan la participación y el disenso que la entidad necesita para seguir creciendo y luchando por el bienestar de los trabajadores de prensa de la provincia.
Consideramos oportuno el pedido, ya que en su momento, cuando la figura del secretario general del gremio, Oscar Gijena, fue objeto de ataques similares, fue la institución la que repudió estas acciones.
Más allá de las mentiras y de las menciones a aspectos de la vida privada de algunos de los ofendidos, la situación puede generar consecuencias en el ámbito laboral de algunos de ellos, y efectos desfavorables para el conjunto de los trabajadores.
Aprovechamos la ocasión para solicitarles que, en función de la necesaria democracia interna y el debate que debe darse en el seno de nuestro gremio sobre difrentes aspectos, se incluya en el portal “primerafuente” el link del blog de nuestra corriente de pensamiento.
Sin otro particular, y a la espera de una pronta y favorable respuesta, saludamos a Uds. atentamente.

Adhieren: Valeria Totongi, Facundo Pereyra, Maby Sosa, Gustavo Rodríguez, Carlos Páez, Fabio Ladetto, José Sbrocco, Marcelo Cuello, Alejandro Jade Díaz, Ricardo Scolnik y Rodrigo Rodríguez, entre otros.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Si mal no recordamos, los que empezaron con campañas difamatorias en contra de los dirigente de la APT fueron ustedes. ¿Y ahora no se bancan un par de mail que hablan de sus intenciones de quedarse en el gremio cuando ya estuvieron y de sus buenas relaciones con la patronal? A llorar a la Iglesia y a la Sinagoga.

Anónimo dijo...

No entiendo el comentario que se agregó, también en carácter anónimo. Evidentemente no hay lugar para el disenso, cuando eso sucede es éticamente necesario dar un paso al costado. Tampoco me imaginaba que la Apt tenga tantos defensores y fanáticos por fuera como para aplaudir claros actos de autoritarismo.